Kit de oxígeno portátil para perros de más de 15 kg

Los perros de tamaño grande no están exentos de dificultades respiratorias, especialmente en presencia de patologías cardíacas o sobrepeso. Entre las razas más sensibles se encuentran: Golden Retriever, Pastor Alemán y American Bully. Si notas cansancio, respiración acelerada o crisis repentinas, el kit de oxígeno puede ser un buen apoyo mientras acudes al veterinario.

Estos kits son muy seguros de usar. Como responsable de tu mascota, conoces bien a tu animal: si notas respiración agitada, postura encorvada, encías pálidas o azuladas, letargo o dificultad para recuperarse después de un paseo con calor, utilizarlo de inmediato puede ayudar a que tu mascota se sienta mejor mientras acudes al veterinario. Si se utiliza demasiado tarde, cuando la condición ya es grave, el beneficio puede ser menor.

No. El kit está pensado para utilizarse ante los primeros signos de dificultad respiratoria, no cuando la situación ya es grave. Actuar con antelación puede evitar un empeoramiento y ofrecer un alivio inmediato.

Con nuestros kits de oxígeno portátiles, no existe el riesgo de administrar “demasiado” oxígeno. Nunca alcanzan valores de flujo o volumen que puedan resultar peligrosos. La toxicidad del oxígeno solo aparece en caso de concentraciones muy elevadas durante periodos prolongados. Cada kit está preconfigurado con la dosis correcta y los 30–90 minutos de oxígeno que contiene no son suficientes para causar daño.

Es normal que al principio muestre desconfianza. Ofrécele una golosina, háblale con un tono tranquilizador y deja que se acostumbre gradualmente al contacto.

Sí, pero solo si es necesario. Cada botella también puede usarse de forma parcial: puedes interrumpir y reanudar el flujo según la situación.

No. Son de un solo uso, pero seguras y ligeras. Deben desecharse siguiendo las indicaciones locales sobre el reciclaje de aluminio o en los residuos no reciclables.

Las botellas PawPrint son pequeñas, ligeras y manejables: tienen una presión más de 10 veces inferior a la de una botella convencional. Son seguras para usar en casa y en el coche. Resisten tanto el calor (hasta 49 °C) como el frío, por lo que también son seguras si el paquete se deja en el exterior. El oxígeno no es inflamable, pero puede acelerar la combustión: mantén las botellas alejadas de llamas abiertas y no las perfores, igual que cualquier aerosol.